Intentan despojar a pobladores de “El Arca” (Campeche) de sus tierras. Hay 21 presos
Campeche, Camp; a 13 de abril de 2010.
Boletín de la Liga Juvenil de la Unión Proletaria “Hasta la Victoria, Siempre”, adherente a la Otra Campaña.
El 10 de abril de 2010, cumpliéndose el 91 aniversario luctuoso del caudillo revolucionario Emiliano Zapata, los malos gobiernos siguen su política de despojo de tierras a los campesinos pobres en el país y en Campeche no es la excepción. En dicha fecha, mientras el gobernador de Campeche, Fernando Eutimio Ortega Bernés (FOB), da un discurso proclamando la continuidad de su gobierno con los ideales de Zapata, en los hechos el mismo día 100 elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) arrestaron a 20 campesinos acusados injustamente de invasión de un predio que han trabajado por 11 años, pero que ahora se adjudica un particular, Salvador Rico, comisario del ejido Ignacio Gutiérrez y hermano de la diputada Domitila Rico.
Cabe señalar que en México existe en la ley algo llamado “Prescripción Positiva” que otorga el derecho de obtener un terreno a quien lo haya hecho producir durante 10 años; ésta legislación tenía como objetivo combatir el latifundio y la acumulación de tierras ociosas. Éste es uno de los escasos logros de la Revolución Mexicana de 1910 que aún se conservan en papel, pero como letra muerta, pues en la realidad se está entrando en una nueva etapa latifundista y tenemos el ejemplo de “El Arca” e incluso del desalojo del pueblo de “San Antonio Ebulá” en beneficio del empresario Eduardo Escalante para comprobarlo.
Breve historia de la comunidad “el Arca”
La comunidad conocida como “El Arca” se ubica entre los ejidos “Reforma Agraria” e “Ignacio Gutiérrez” del municipio de Champotón, Campeche, México. Fue fundada el 2 de agosto del 2009, luego de 10 años de trabajar el terreno, cuando los labriegos decidieron construir sus casas cerca de sus milpas. Ellos venían de ejidos circundantes a dicho predio.
El mismo terreno estuvo posesionado antes por una comunidad menonita quienes la tenían bajo concesión como extranjeros, pero los terrenos pertenecen a la nación, por lo cual al ser abandonada por ellos, los actuales habitantes decidieron utilizarla para producir sus bienes de consumo y posteriormente habitarla fundando su propio pueblo.
Los intentos de despojo y las aprehensiones.
A un mes de haber fundado la comunidad con el nombre de “El Arca”, en Septiembre del 2009 se liberan órdenes de aprehensión contra 7 pobladores y procedió contra 2 de ellos, uno de los cuales continúa encerrado sin derecho a fianza. Esto bajo demanda interpuesta por los extranjeros conocidos como “menonitas” que abandonaran las tierras hace una década.
Lo que no queda claro es cómo procedió la demanda ya que en México la Constitución prohíbe la venta de terrenos nacionales a extranjeros y sólo contempla el otorgamiento de concesiones de trabajo que, en este caso, ellos abandonaron 11 años atrás, mismos que han sido invertidos en trabajo por ciudadanos mexicanos que han sustentado un medio de vida en el predio y por derecho deben tener trato preferencial.
7 meses después, el pasado 5 de abril llega al pueblo Salvador Rico adjudicándose la propiedad del predio donde se ubica “El Arca” y amenaza a los pobladores con un “derramamiento de sangre” si no desalojan las tierras. Rico asegura que cuenta con el respaldo del gobernador FOB pues trabajó para su campaña electoral. Además, su hermana Domitila es diputada lo cual denota el tráfico de influencias.
Cumpliendo su palabra, Salvador Rico ingresa en “El Arca” el día 10 de abril del 2010 y arremete contra los habitantes, apoyado por 100 elementos de la PEP quienes arrestan a 20 hombres que se encontraban laborando en la milpa y agreden a las mujeres y niños que intentan socorrerlos. En ningún momento presentaron orden de aprehensión alguna ni se les notificó el motivo del arresto, violando así sus garantías individuales.
La Protesta.
Inmediatamente después de la agresión, los pobladores se organizan y viajan a la capital del estado de Campeche y se instalan frente a las oficinas de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) del estado, donde demandan la liberación de sus compañeros. Se suman a su apoyo algunas organizaciones campesinas de la región.
Al no ser atendidas sus demandas, el día 13 de abril, los pobladores de “El Arca” deciden trasladarse a los bajos del Palacio de Gobierno del estado e instalan un plantón indefinido para exigir la liberación de los presos. Al enterarnos de los sucesos, algunos adherentes a la Otra Campaña manifestamos la política de despojo que está implementando el mal gobierno.
Los pobladores conformaron una comisión de intermediación con el gobierno, donde lograron reducir el monto de la fianza solicitada por cada preso de 30 mil a 5 mil pesos, aunque sigue siendo una dificultad cubrir el pago dada la situación precaria de las familias campesinas y sin dejar de notar el hecho de que se les está imputando la culpabilidad.
Mientras tanto los pobladores asentados en Plantón en el palacio gubernamental han manifestado que mantendrán la lucha hasta ver fuera de prisión a sus compañeros y ver solucionado a su favor el conflicto de tierras.
¡Zapata vive, la lucha sigue!
¡Ya basta de despojar las tierras campesinas!
¡Libertad y Justicia para los pobladores de “El Arca", para los presos de conciencia de la Resistencia Civil de Candelaria y del resto del país!
Campeche, Camp; a 13 de abril de 2010.
Boletín de la Liga Juvenil de la Unión Proletaria “Hasta la Victoria, Siempre”, adherente a la Otra Campaña.
El 10 de abril de 2010, cumpliéndose el 91 aniversario luctuoso del caudillo revolucionario Emiliano Zapata, los malos gobiernos siguen su política de despojo de tierras a los campesinos pobres en el país y en Campeche no es la excepción. En dicha fecha, mientras el gobernador de Campeche, Fernando Eutimio Ortega Bernés (FOB), da un discurso proclamando la continuidad de su gobierno con los ideales de Zapata, en los hechos el mismo día 100 elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) arrestaron a 20 campesinos acusados injustamente de invasión de un predio que han trabajado por 11 años, pero que ahora se adjudica un particular, Salvador Rico, comisario del ejido Ignacio Gutiérrez y hermano de la diputada Domitila Rico.
Cabe señalar que en México existe en la ley algo llamado “Prescripción Positiva” que otorga el derecho de obtener un terreno a quien lo haya hecho producir durante 10 años; ésta legislación tenía como objetivo combatir el latifundio y la acumulación de tierras ociosas. Éste es uno de los escasos logros de la Revolución Mexicana de 1910 que aún se conservan en papel, pero como letra muerta, pues en la realidad se está entrando en una nueva etapa latifundista y tenemos el ejemplo de “El Arca” e incluso del desalojo del pueblo de “San Antonio Ebulá” en beneficio del empresario Eduardo Escalante para comprobarlo.
Breve historia de la comunidad “el Arca”
La comunidad conocida como “El Arca” se ubica entre los ejidos “Reforma Agraria” e “Ignacio Gutiérrez” del municipio de Champotón, Campeche, México. Fue fundada el 2 de agosto del 2009, luego de 10 años de trabajar el terreno, cuando los labriegos decidieron construir sus casas cerca de sus milpas. Ellos venían de ejidos circundantes a dicho predio.
El mismo terreno estuvo posesionado antes por una comunidad menonita quienes la tenían bajo concesión como extranjeros, pero los terrenos pertenecen a la nación, por lo cual al ser abandonada por ellos, los actuales habitantes decidieron utilizarla para producir sus bienes de consumo y posteriormente habitarla fundando su propio pueblo.
Los intentos de despojo y las aprehensiones.
A un mes de haber fundado la comunidad con el nombre de “El Arca”, en Septiembre del 2009 se liberan órdenes de aprehensión contra 7 pobladores y procedió contra 2 de ellos, uno de los cuales continúa encerrado sin derecho a fianza. Esto bajo demanda interpuesta por los extranjeros conocidos como “menonitas” que abandonaran las tierras hace una década.
Lo que no queda claro es cómo procedió la demanda ya que en México la Constitución prohíbe la venta de terrenos nacionales a extranjeros y sólo contempla el otorgamiento de concesiones de trabajo que, en este caso, ellos abandonaron 11 años atrás, mismos que han sido invertidos en trabajo por ciudadanos mexicanos que han sustentado un medio de vida en el predio y por derecho deben tener trato preferencial.
7 meses después, el pasado 5 de abril llega al pueblo Salvador Rico adjudicándose la propiedad del predio donde se ubica “El Arca” y amenaza a los pobladores con un “derramamiento de sangre” si no desalojan las tierras. Rico asegura que cuenta con el respaldo del gobernador FOB pues trabajó para su campaña electoral. Además, su hermana Domitila es diputada lo cual denota el tráfico de influencias.
Cumpliendo su palabra, Salvador Rico ingresa en “El Arca” el día 10 de abril del 2010 y arremete contra los habitantes, apoyado por 100 elementos de la PEP quienes arrestan a 20 hombres que se encontraban laborando en la milpa y agreden a las mujeres y niños que intentan socorrerlos. En ningún momento presentaron orden de aprehensión alguna ni se les notificó el motivo del arresto, violando así sus garantías individuales.
La Protesta.
Inmediatamente después de la agresión, los pobladores se organizan y viajan a la capital del estado de Campeche y se instalan frente a las oficinas de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) del estado, donde demandan la liberación de sus compañeros. Se suman a su apoyo algunas organizaciones campesinas de la región.
Al no ser atendidas sus demandas, el día 13 de abril, los pobladores de “El Arca” deciden trasladarse a los bajos del Palacio de Gobierno del estado e instalan un plantón indefinido para exigir la liberación de los presos. Al enterarnos de los sucesos, algunos adherentes a la Otra Campaña manifestamos la política de despojo que está implementando el mal gobierno.
Los pobladores conformaron una comisión de intermediación con el gobierno, donde lograron reducir el monto de la fianza solicitada por cada preso de 30 mil a 5 mil pesos, aunque sigue siendo una dificultad cubrir el pago dada la situación precaria de las familias campesinas y sin dejar de notar el hecho de que se les está imputando la culpabilidad.
Mientras tanto los pobladores asentados en Plantón en el palacio gubernamental han manifestado que mantendrán la lucha hasta ver fuera de prisión a sus compañeros y ver solucionado a su favor el conflicto de tierras.
¡Zapata vive, la lucha sigue!
¡Ya basta de despojar las tierras campesinas!
¡Libertad y Justicia para los pobladores de “El Arca", para los presos de conciencia de la Resistencia Civil de Candelaria y del resto del país!
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