martes, 18 de agosto de 2009

así apareció en la prensa local (diario Tribuna)

Violento desalojo de vecinos de Ebulá

Por instrucciones del empresario constructor Eduardo Escalante Escalante, más de 100 presuntos elementos de seguridad privada armados con tractores, machetes y palos, desalojaron a los pobladores de San Antonio Ebulá, con saldo de seis lesionados —dos con armas de fuego—, dos detenidos y 50 casas destruidas, al tiempo que mantienen sitiados los alrededores del lugar.Los aprehendidos fueron puestos en libertad anoche, mientras los afectados denunciaron a Eduardo Escalante Escalante y a Daniel Escalante Castillo por los presuntos delitos de robo, daños en propiedad ajena y lesiones.Con los rostros cubiertos y vestidos con playeras de colores amarillo y naranja, los “agentes” de entre 18 y 20 años de edad —presuntamente reclutados la noche anterior en colonias populares—, entraron al poblado alrededor de las cinco de la mañana a bordo de camionetas de la Constructora Escalante.Fueron escoltados por dos tractores, y tuvieron un primer enfrentamiento en el acceso, donde los habitantes habían levantado una barricada e incendiaron llantas, pero se replegaron al monte al verse superados en número.Los tractores cruzaron la barricada y surgieron los primeros heridos cuando dos pobladores recibieron pedradas en la cabeza. Luego los habitantes respondieron con bombas molotov. La maquinaria continuó su camino para destruir chozas y derribar decenas de árboles.Fue hasta alrededor de las seis de la mañana cuando unos 50 antimotines, agentes de la Policía Ministerial y ministerios públicos, arribaron al lugar “para evitar mayor enfrentamiento entre las dos partes”, según señaló Manuel Salgado Serrano, director de la Policía Estatal Preventiva, y reportó que dos de los parapoliciacos —supuestos agentes de seguridad privada— resultaron lesionados con armas de fuego, por lo que fueron trasladados al Hospital General “Alvaro Vidal Vera”.Según Salgado Serrano recibieron reporte del Centro de Comunicación y Comando de que había disparos de armas de fuego y enfrentamientos en San Antonio Ebulá, y se trasladaron al poblado. Aclaró que la policía no participó ni respaldó ningún desalojo, simplemente estuvieron “para evitar enfrentamientos”.El poblado, ubicado a tres kilómetros de la carretera federal Campeche-Mérida, data de más de 30 años y es la tercera ocasión en que el empresario recurre al desalojo bajo el argumento de ser el propietario del predio.Alrededor de las ocho horas las humildes viviendas quedaron reducidas a un montón de palos y láminas, observado desde lejos por sus propietarios, mientras en el centro del poblado fueron estacionados los tractores, resguardados por los elementos de seguridad privada y acordonados por la PEP.Fueron detenidos Ranulfo Ramírez Naal y su hijo Francisco Ranulfo, quienes lamentaron la acción de la policía estatal, pues los presuntos “agentes” de seguridad privada atacaron a los vecinos cuando se encontraban en sus viviendas, y en vez de detener a los agresores, apresaron a las víctimas.Los elementos de seguridad privada sitiaron el lugar, armados con machetes y palos, y obstruyeron la entrada a toda persona, mediante barricadas; los pobladores que se refugiaron en el monte, poco a poco salieron, por lo que se mantuvo un ambiente de tensión durante el día.Los pobladores negaron que hayan utilizado armas de fuego, pues dijeron estar conscientes de los actos de provocación del empresario para fabricarles delitos, por lo que ni siquiera machetes guardaban en sus casas.

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